Honduras se une al Alba y ataca a EE.UU. y Hugo Chávez criticó a Estados Unidos, los TLC y los medios de comunicación
La calurosa mañana de ayer en esta ciudad presagiaba la intensidad de los discursos que contra Estados Unidos y su proyecto Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA), con el que se expanden los tratados comerciales, lanzarían los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez; de Bolivia, Evo Morales; de Nicaragua, Daniel Ortega; y de Honduras, Manuel Zelaya.
Las alocuciones de los mandatarios en la plaza de La Libertad Francisco Morazán, frente a Casa Presidencial, durante la firma de adhesión de Honduras al Alba (Alternativa Bolivariana para las Américas), que impulsa Chávez, se enfilaron para arremeter contra los "yanquis", los medios de comunicación y los sectores privados que han criticado el proyecto que abandera el presidente venezolano.
Las palabras de Chávez fueron las más duras. "Ya basta de oligarquías pitiyanquis... fieras heridas, serpientes venenosas; no nos importa que ladren; ladren, que seguiremos labrando un futuro de libertad", expresó. Sus homólogos e invitados de honor en la mesa le aplaudían, entre ellos, la diputada del FMLN en el Parlamento Centroamericano Nidia Díaz.
Contra los medios
Más adelante, Chávez se refirió a los medios de comunicación, en especial a los hondureños, comparándolos con "artillería pesada", la cual, según sus palabras, ha sido "desatada por los yanquis". Incluso, los acusó de ser instrumentos para atacar el Alba. "Me atrevería a decir que cumplen con instrucciones del Pentágono", dijo Chávez, en referencia al gobierno estadounidense. Luego, elevando su tono de voz, dijo: "El ALCA lo mandamos al carajo hace ya varios años... lo enterramos en el Mar del Plata (Argentina)".
Y prosiguió: "Que sepan los pitiyanquis que vamos a ser libres cueste, lo que cueste... llegó la hora de la independencia".
El venezolano pidió al próximo gobernante de Estados Unidos que respete las decisiones de los gobiernos de América Latina. "El que no lo haga, tendrá por delante las lanzas de nuestra dignidad", advirtió.
Chávez, quien discursó por más de una hora, dijo que el que se opone al Alba es "un vende patria o un ignorante". También se refirió al presidente estadounidense, George Bush, de forma particular al llamarlo "espanto de América Latina".
Pero el presidente venezolano, si bien fue de los últimos en intervenir, previo a la firma de la adhesión de Honduras al Alba, no fue el único que en expresarse en contra de lo que ellos llaman "el imperio", refiriéndose a EE.UU.
También su homólogo boliviano, Evo Morales, fue enfático al rechazar los tratados comerciales con el gobierno estadounidense. "Nos hemos organizado para contrarrestar el ALCA... que sólo trae privatización de los servicios; con el Alba no hay privatización", aseguró. Y planteó un panorama tajante respecto a estos dos proyectos, al decir que sólo hay dos caminos: estar con los buenos o con los malos.
Morales opinó que el ALCA "representa la muerte; sólo se encarga de acumular el capital, no le importa la gente pobre. Los TLC son peligrosos, porque dividen países", dijo el mandatario de Bolivia.
Y el nicaragüense Daniel Ortega se deshizo en elogios hacia Chávez y su proyecto. Y también se refirió a los "ataques de los enemigos" en contra de dicho plan, e hizo referencia a la oposición que enfrentó en Nicaragua de parte de la empresa privada y de otros sectores para que no se sumara al Alba, el cual, según él, sólo les ha dado beneficios.
Asimismo, el vicepresidente de Cuba, Carlos Lage, destacó los "aportes" que genera ser socio de Chávez. "El médico del ALBA no gana dinero, gana vidas", comentó.
De igual forma, Zelaya, quien por ser el anfitrión disertó al final, afirmó en tono desafiante: "No tenemos por qué pedir permiso a ningún gobierno yanqui para sumarnos al Alba".
El mandatario hondureño y el canciller Edmundo Orellana aseveraron que ser socio de Venezuela no implica que tendrán que dar algo a cambio y menos aún que se trate de una alianza de tipo militar como han criticado varios sectores aquí o, incluso, que peligre el envío de remesas de los hondureños que viven en Estados Unidos, como indica un campo pagado en televisión por un grupo de familiares de connacionales.
"Aquí todo es voluntario; se amplían los mercados", afirmó Orellana y negó que estén comprometidos a rendir lealtad política o ideológica a Chávez.
Al final, pese a las críticas, Zelaya firmó el documento que certifica que Honduras se suscribe al Alba, frente a simpatizantes movilizados desde el interior del país.
No obstante, el compromiso no está escrito en piedra, porque aún falta que pase por el filtro del Congreso, donde Zelaya podría tener dificultades para que se lo aprueben, ya que la mayoría de partidos son de derecha y están en contra del ALBA, incluso, el partido que lo llevó al poder (Partido Liberal) está divido por este pacto con Venezuela.
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